Algunas definiciones:
Carlos
Mastrángelo, en su libro El cuento argentino, define el cuento de
la siguiente manera:
- Un cuento es una seria breve y escrito de incidentes;
- de ciclo acabado y perfecto como un círculo;
- siendo muy esencial el argumento, el asunto o los incidentes en sí;
- trabados éstos en una única e ininterrumpida ilación;
- sin grandes intervalos de tiempo y espacio;
- rematados por un final imprevisto, adecuado y natural.
Es una narración breve y sencilla, puede ser oral o
escrita, en la que se relata una historia tanto real o imaginaria. Además es
breve por solo trasmitir un solo asunto o acción. El cuento tiene un número
reducido de personajes. Los cuentos tradiciones transmiten generalmente una
enseñanza o moraleja al lector.
Otras definiciones:
·
Narración
breve, escrita generalmente en prosa, y que por su enfoque constituye un género
literario típico, distinto de la novela y de la novela corta.
·
Breve
relato de sucesos ficticios y de carácter sencillo, hecho con fines morales o
educativos.
·
Relación
de suceso - Relación de un suceso falso o de pura invención - Fábula que se
cuenta a los muchachos para divertirlos.
·
Es
un relato breve y artístico de hechos imaginarios. Son esenciales en el cuento
el carácter narrativo, la brevedad del relato, la sencillez de la exposición y
del lenguaje y la intensidad emotiva.
·
Breve
narración en prosa, que desarrolla un tema preferentemente fantástico y cuyo
fin es divertir.
·
Es
una narración corta, breve, de hechos reales o ficticios, cuyo origen es la
anécdota y su finalidad es entretener; a veces algo moralizadora.
·
Es
un relato corto donde se narra una acción realizada por unos personajes en un
ambiente determinado.
Diferencia del cuento y la
novela:
Una característica estructural que lo diferencia de la
novela es la frontera entre un cuento largo y una novela corta no es fácil de
definir. Si bien la novela se estructura también como el cuento en exposición,
nudo y desenlace, estas tres partes suelen tener una extensión aproximadamente
igual, mientras que en el cuento existe una preponderancia de un solo nudo o
núcleo alrededor del cual gira la historia.
Partes del cuento:
1.- Introducción, inicio o
planteamiento:
La parte inicial de la historia, donde se presentan todos los personajes
y sus propósitos. Pero fundamentalmente, donde se presenta la normalidad de la
historia. Lo que se presenta en la introducción es lo que se quiebra o altera
en el nudo. La introducción sienta las bases para que el nudo tenga sentido. En esta
parte, el tipo de composición escrita que se utiliza es la descripción. En ella
se dan a conocer:
·
Cuando sucede la historia: época o tiempo
·
Donde sucede la historia: lugares
·
Quién son los protagonistas y como son
2.- Nudo:
Desarrollo o nudo: Es la parte donde se presenta el conflicto o el
problema de la historia, toma forma y suceden los hechos más importantes. El
nudo surge a partir de un quiebre o alteración de lo planteado en la
introducción. Es la parte más importante del cuento, la más jugosa y significativa, y
también la más larga. En ella se diferencian dos instancias:
·
Problema: algo especial aparece o sucede
·
Suceso: distintas situaciones y hechos para
solucionar el problema. Suelen ser varias
Se cuentan todas las
situaciones, líos, enredos y sucesos de los personajes. La composición
escrita más usual para esta parte es la conversación, porque los personajes
hablan entre ellos, aunque también se utiliza la narración.
3.- Final y desenlace:
Donde se suele dar
el clímax, la solución a la historia y finaliza la narración. Incluso en los
textos con final abierto, hay un desenlace. Puede terminar en un final feliz o
no. Existen muchas clases de final: feliz, triste, accidental, imprevisto,
sorpresa, etc. Es la última parte del cuento y también la más corta. En ella
debe terminar la historia. Pueden escribirse:
·
Conclusión: el problema se soluciona
·
Final: se vuelve a la normalidad y cotidiana.
El tiempo.
Las dificultades que se presentan al momento de ordenar la acción se
deben a que los autores juegan
con el tiempo en sus narraciones
para lograr distintos efectos. Ésa es la razón por la que generalmente la novela y el cuento policiacos comienzan cuando el crimen o el delito
ya se han cometido.
En ocasiones, en el caso del cuento, la trama de la obra adopta formas particulares, no lineales,
que permiten mezclar el pasado con el presente; con ello, el cuento se torna
más atractivo e interesante para el lector.
Existen algunos saltos
temporales que son muy usados
en la literatura con diversas finalidades, como elracconto y el flashback.
El racconto es un retroceso temporal extenso que
se produce en un relato y sirve para recoger situaciones pasadas. El flashback también es un salto hacia el pasado,
pero se diferencia del racconto porque es más breve.
El texto literario puede, además, tener un comienzo in media res, cuando la
narración se inicia en un punto intermedio, por lo que el relato debe
retroceder para recuperar el inicio; o un comienzo in extrema res, cuando
el relato se inicia con el fin y después retrocede para conocer su desarrollo.
A partir de estos ordenamientos podremos comprender la trama. El ordenamiento temporal
dosificará la información a la que accedemos con respecto a los personajes, a
las claves que solucionan el enigma en el relato policiaco, o a un misterio que
se ha abierto al realizar un viaje en el tiempo.
Tipos de cuentos:
La
clasificación del cuento puede ser muy variada. Depende del punto de vista que
adoptemos en cuanto a contenido, época literaria, enlace con la realidad,
elemento sobresaliente, etc., lo que permite que un mismo cuento pertenezca a
varios encasillados simultáneamente. Esbozaremos, en líneas generales, los
principales tipos de cuentos que existen:
Cuentos
en verso y prosa: los
primeros se consideran como poemas épicos menores; los segundos son narraciones
breves, desde el punto de vista formal. Los teóricos sajones, atendiendo a la
extensión del relato, clasifican como novela corta toda narración que fluctué
entre 10.000 y 35.000 palabras, y como cuento el relato que no sobrepase las
10.000 palabras.
Cuentos
populares y eruditos:
los primeros son narraciones anónimas, de origen remoto, que generalmente
conjugan valores folclóricos, tradiciones y costumbres, y tienen un fondo
moral; los segundos poseen origen culto, estilo artístico y variedad de
manifestaciones.
Tanto
unos como otros pueden subclasificarse en: infantiles, fantásticos, poéticos y
realistas.
Cuentos
infantiles: se
caracterizan porque contienen una enseñanza moral; su trama es sencilla y
tienen un libre desarrollo imaginativo. Se ambientan en un mundo fantástico
donde todo es posible. Autores destacados en este género son Andersen y
Perrault.
Cuentos
fantásticos o de misterio:
su trama es más compleja desde el punto de vista estructural; impresionan por
lo extraordinario del relato o estremecen por el dominio del horror. Autores
destacados en este género son Hoffmann y Poe.
Cuentos
poéticos: se
caracterizan por una gran riqueza de fantasía y una exquisita belleza temática
y conceptual. Autores destacados en este género son Wilde y Rubén Darío.
Cuentos
realistas: reflejan
la observación directa de la vida en sus diversas modalidades: sicológica,
religiosa, humorística, satírica, social, filosófica, histórica, costumbrista o
regionalista. Autores destacados en este gnero son Palacio Valdés, Unamuno,
Quiroga, etc.
Linkografía:
La gota de agua
Hans Christian Andersen
Seguramente sabes lo que es un cristal de aumento, una
lente circular que hace las cosas cien veces mayores de lo que son. Cuando se
coge y se coloca delante de los ojos, y se contempla a su través una gota de
agua de la balsa de allá fuera, se ven más de mil animales maravillosos que, de
otro modo, pasan inadvertidos; y, sin embargo, están allí, no cabe duda. Se
diría casi un plato lleno de cangrejos que saltan en revoltijo. Son muy
voraces, se arrancan unos a otros brazos y patas, muslos y nalgas, y, no
obstante, están alegres y satisfechos a su manera.
Pues he aquí que vivía en otro tiempo un anciano a quien
todos llamaban Crible-Crable, pues tal era su nombre. Quería siempre hacerse
con lo mejor de todas las cosas, y si no se lo daban, se lo tomaba por arte de
magia. Así, peligraba cuanto estaba a su alcance.
El viejo estaba sentado un día con un cristal de aumento
ante los ojos, examinando una gota de agua que había extraído de un charco del
foso. ¡Dios mío, que hormiguero! Un sinfín de animalitos yendo de un lado para
otro, y venga saltar y brincar, venga zamarrearse y devorarse mutuamente.
-¡Qué asco! -exclamó el viejo Crible-Crable-. ¿No habrá
modo de obligarlos a vivir en paz y quietud, y de hacer que cada uno se cuide
de sus cosas?
Y piensa que te piensa, pero como no encontraba la
solución, tuvo que acudir a la brujería.
-Hay que darles color, para poder verlos más bien -dijo,
y les vertió encima una gota de un líquido parecido a vino tinto, pero que en
realidad era sangre de hechicera de la mejor clase, de la de a seis peniques. Y
todos los animalitos quedaron teñidos de rosa; parecía una ciudad llena de
salvajes desnudos.
-¿Qué tienes ahí? -le preguntó otro viejo brujo que no
tenía nombre, y esto era precisamente lo bueno de él.
-Si adivinas lo que es -respondió Crible-Crable-, te lo
regalo; pero no es tan fácil acertarlo, si no se sabe.
El brujo innominado miró por la lupa y vio efectivamente
una cosa comparable a una ciudad donde toda la gente corría desnuda. Era
horrible, pero más horrible era aún ver cómo todos se empujaban y golpeaban, se
pellizcaban y arañaban, mordían y desgreñaban. El que estaba arriba quería irse
abajo, y viceversa.
-¡Fíjate, fíjate!, su pata es más larga que la mía. ¡Paf!
¡Fuera con ella! Ahí va uno que tiene un chichón detrás de la oreja, un
chichoncito insignificante, pero le duele, y todavía le va a doler más.
Y se echaban sobre él, y lo agarraban, y acababan
comiéndoselo por culpa del chichón. Otro permanecía quieto, pacífico como una
doncellita; sólo pedía tranquilidad y paz. Pero la doncellita no pudo quedarse
en su rincón: tuvo que salir, la agarraron y, en un momento, estuvo
descuartizada y devorada.
-¡Es muy divertido! -dijo el brujo.
-Sí, pero ¿qué crees que es? -preguntó Crible-Crable-.
¿Eres capaz de adivinarlo?
-Toma, pues es muy fácil -respondió el otro-. Es
Copenhague o cualquiera otra gran ciudad, todas son iguales. Es una gran
ciudad, la que sea.
-¡Es agua del charco! -contestó Crible-Crable.